Ciudad de México. Integrantes del movimiento “Todos somos un Ejército, mexicanos somos todos” se manifestaron ante la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) para demandar apoyo a los militares presos, acusados de cometer delitos durante la participación en acciones de seguridad pública.
Aunque se refirieron a 4 soldados detenidos por el caso de Nuevo Laredo, Tamaulipas, donde son señalados de disparar contra cinco civiles desarmados, en febrero pasado, los manifestantes afirman que tienen documentados expedientes de otros 17 militares presos imputados de delitos semejantes.
Jacqueline Zárate, abogada de la organización, sostuvo además que otros tantos militares han sido desaparecidos al participar en estas acciones de seguridad pública.
Madres, hermanos, hijos y hermanos de los militares presos marcharon sobre la avenida Industria Militar, frente a la sede de la Sedena, enarbolando pancartas con las fotos y nombres de sus familiares, entre ellos Susana Sayas, Patricio García Hernández, Óscar Manuel González Andrade y Victoriano Rodríguez Zurita, entre otros.
“Estamos de acuerdo en que los militares participen en tareas de seguridad pública, porque nos sentimos más seguros, tal vez mucha gente dice no están capacitados y estarán en lo correcto, pero los que más han dado seguridad al país han sido los elementos de las Fuerzas Armadas”, afirmó Zárate quien sin embargo añadió que es preciso darles seguridad jurídica.
Por ello propuso que la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) desplieguen observadores en todas las acciones de seguridad pública en las que participen militares, que se les capacite para hacer estas tareas y se des mejoren sus condiciones económicas.